lunes, 2 de mayo de 2016

Destino de una Call Girl

ADELANTO


Besé sus párpados cerrados que escondían sus hermosos ojos de mi, su naricita, sus mejillas, su frente, todo una y otra vez hasta que sentía como despertaba y soltaba unas risitas por las cosquillas que estaba haciéndole. Era nuestra pequeña tradición de cumpleaños, algo que llevaba haciendo desde que cumplió su primer año. Quizás no le estaba dando la mejor de las vidas, pero si todo el amor que tenía por él en mi corazón. Matt subió sus manos agarrándose a mi jersey riéndose sin parar y revolviéndose en la cama. 
— ¡Mami para! —chilló con la voz ahogada por la risa. 
—No pienso parar. Soy el monstruo de los besos y las cosquillas.
— ¡Mamá! —se revolvió aún más, retorciéndose en la cama y moviendo sus piernas en el aire. 
— ¿Qué pasa aquí? —preguntó la voz más hermosa del mundo haciéndome flaquear un segundo casi logrando que Matt se escapara de mi. 
— ¡Edward, ayuda! Mami es el monstruo de los besos y las cosquillas y  quiere comerme. 
— ¿Así que un monstruo, eh? —alcé los ojos para verle apoyado en el marco de la puerta con los brazos cruzados y una sonrisa torcida en los labios. 
— ¡Si! Y voy a comerme a este pequeño si no me dice que día es hoy. 
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Edward pasó una mano por mi cintura agarrando mi jersey para detenerme. Me giré para mirarle cuando sentí sus labios sobre los míos dejando un tierno y casto beso. No era un beso apasionado ni largo, pero con Matt delante era lo máximo que podía pedir. Esa mañana de cumpleaños era la mejor que habíamos tenido Matt y yo hasta el momento. Ahora había más gente a nuestro alrededor que nos quería, se preocupaba por nosotros y estaban a nuestro lado pasara lo que pasara. Y Edward estaba aquí, con nosotros, como si fuera un miembro indispensable de nuestra pequeña familia, compartiendo el momento y queriéndonos más de lo que nos quería cualquier otra persona. No podía llegara explicar con palabras toda la felicidad que sentía ante ese hecho. 
—No beses a mi mamá —Matt le fulminó con la mirada enfurruñándose mientras cruzaba sus brazos. 
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—Porque tu no eres su novio, solo los papás y las mamás se besan, y porque yo soy su hombrecito y su guardián. Solo yo tengo ese privilegio —Edward echó la cabeza hacia atrás soltando una carcajada. 

3 comentarios:

  1. Tengo que dejarte un comentario, porque me he encantado el adelanto, será que Matt se pondrá celoso de la relación entre su madre y Edward?

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    1. Hola Teresa!! Eres el primer comentario del Blog, tendré que hacer algo especial para ti por ello, jajajaaj. El adelanto no está 100% entero, cogí partes del capítulo que dejaban ver algo pero que mantenían la intriga, aunque lo que podemos decir que le pasa a Matt más que celos es protección, y una sensación un tanto triste. Tiene una frase, que a mi personalmente mientras lo escribía, me mató.
      Este finde subiré el capítulo, supongo que para el lunes estará porque todavía tengo que editarlo y ver si modifico algo.
      Un besito!!

      P.D: Pensaré en el regalo, que ya que hablo cumplo con mi palabra ;)

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    2. No hace falta que me regales nada. Los comentarios los dejo porque quiero. Pero si insistes no te diré que no.

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